jueves, 13 de diciembre de 2012

UN REGALO ESPECIAL - Sarah Degel


La luna refulgía con un brillo especial. Esa noche, se sentía algo en el ambiente y aquella enorme luna rojiza lo anunciaba.

Lena adoraba mirar el cielo estrellado capitaneado por la luna. Todas las noches, se asomaba a su ventana a aspirar el aire y admirar el inmenso cielo que se abría ante ella. Pasaba las horas muertas imaginándose mil historias donde ella era una princesa que debía salvar un país extraño y lejano, quizás en alguna otra dimensión.

No era consciente del tiempo que había pasado asomada a su ventana cuando algo pareció cruzar el cielo. Ella se frotó los ojos extrañada, pero no le dio mayor importancia y siguió perdida entre las estrellas.
Unos minutos más tarde, le pareció escuchar algo en la pradera que se extendía más allá de la cerca de su jardín. Una vez, dos veces, tres… Lena no pudo contenerse, cogió su bata y salió a ver qué es lo que estaba sucediendo.
Con pasos sigilosos y trémulos, se dirigió hacia el lugar que sus oídos le indicaron. Saltó la valla torpemente y miró hacia la oscuridad que se presentaba ante ella. Carraspeó, cogió aire y continuó.
Un colorido brillo salía tras un conjunto de arbustos.
«Si había llegado hasta allí, debía continuar», se dijo. Y así lo hizo. Traspasó los arbustos para encontrarse con lo más increíble que jamás se hubiera imaginado. Su boca se abrió al instante y sus ojos parecían dos lunas enormes. Allí estaba, pero no podía ser.
Lena se acercó con cautela y, suavemente, acarició el pelaje de aquel… ¿animal?
Blanco como el mármol, delicado y absolutamente precioso; con un cuerno del color del arcoíris coronando su rostro. El unicornio le miró con ternura y ella sonrió.

viernes, 22 de junio de 2012

MIL ACCIONES - Sarah Degel


Mirarte
o no mirarte y sentirte dentro del alma mía,
las dos cosas lo mismo han de ser.

Tocarte
o no tocarte y  acariciarte con mis pensamientos,
de nuevo lo mismo otra vez.

Besarte
o no besarte y sentir tus labios rozar los míos,
y otra vez  en lo mismo he de caer.

Mil acciones puedo expresar,
y aunque distintas,
de la misma forma han de acabar.

Todo tú,
imán atrayente de mi cuerpo,
de mis acciones y mis pensamientos.

Todo tú,
mi vida, mi locura,
mi perdición, mi aventura.


viernes, 15 de junio de 2012

CORAZÓN DÉBIL - Sarah Degel

Triste, triste y desolado
mi corazón se ha quedado
cuando esas palabras escuché.
Triste, triste y amargado
y sin ganas de vivir.

La oscuridad pesa en mí,
el tiempo eterno se vuelve
y la soledad logra hacerse con mi ser.

Apesadumbrado
y enarcado en la desesperanza,
pero en un halo de ser amado
intenta renacer en vano.

El corazón frío se ha vuelto
y sumido en tal desesperación,
poco  a poco va muriendo.

Por qué continuar hablando
de un corazón inexistente,
olvidado,
el que un día fue amado
y ahora se ha apagado.


jueves, 14 de junio de 2012

EL DÍA EN QUE TE DEJE DE AMAR - Sarah Degel

Cuando el mar logre al cielo unirse
como al principio de la Humanidad,
cuando Adán y Eva no pequen
y nosotros no tengamos el pecado original,
cuando angelitos y demonios
a un mismo juego vayan a jugar,
y los ricos con los pobres
tengan amistad.

Cuando las gaviotas comiencen a nadar
y los peces a volar,
cuando todos una misma lengua hablemos
y sembremos por fin la paz,
cuando los malos sean buenos
y los buenos comiencen a robar,
cuando las blasfemias sean ciertas
y las verdades sean pura falsedad.

Cuando el blanco sea negro
y el negro comience a clarear,
cuando el día esté oscuro
y en la noche comience el sol a iluminar,
cuando mi corazón sea para otro
y el tuyo de otra se empiece a enamorar,
ese, ese será justo el día
en que yo te deje de amar.

miércoles, 13 de junio de 2012

UNO - Sarah Degel

Veneno de mis labios,
embrujo de mi cuerpo,
rosa del jardín
que acaricia el viento.

Jazmín de mi alma
que sale por la ventana
y se pierde a lo lejos
del extenso camino.

Dos pétalos unidos,
tu corazón han de formar
y el viento de jazmín
éste lo han de llevar.

Tu corazón, el mío,
el mío, tuyo tal vez;
uno solo, lleno de ilusiones.
Uno.


martes, 14 de febrero de 2012

EL AMOR DE MI VIDA - Sarah Degel

Deslizo mis dedos sobre su rostro angelical. Tiene el pelo alborotado, los ojos grandes y negros, la boca pequeña y un gracioso lunarcillo en la punta de la nariz.
Está tumbado con su cabeza sobre mi regazo, medio adormilado. Comienzo a acariciar su cabello y recuerdo cómo hace cinco años lo vi por primera vez y al instante supe que iba a ser el amor de mi vida. Tan puro, tan lleno de vida… lo amé desde el primer momento porque enseguida supe que él no me iba a abandonar, que por él iba a ser capaz de hacer cualquier cosa y que me iba a alegrar la vida cada segundo que pasara a su lado. Al día de hoy aún no me lamento.
Dejo de revolver su cabello y le insto a que se levante.
 -Amor, levántate ya. Mira que horas y aún no hemos desayunado.
No contesta, debe de haberse quedado profundamente dormido con mis caricias. Levanto suavemente su cabeza y me levanto. Voy a la cocina a preparar un desayuno especial. Hoy es el día de San Valentín y no encuentro una persona mejor con quien celebrarlo.
Hago un par de zumos naturales de naranja, saco unos cereales y preparo dos tazas con leche. Busco un tarrito y en el salón encuentro un par de rosas de plástico que coloco en el improvisado jarroncito. Saco un par de bombones que he estado reservando celosamente para este día y coloco todo en una bandeja junto a un paquetito envuelto en papel charolado color rojizo.
Vuelvo a la habitación cargando con la bandeja que coloco sobre la cama.
-Despierta, hoy es un gran día: un desayuno delicioso y un regalo.
-¿Un regalo para mí?
-Claro, hoy es San Valentín, el día del amor. Y hay que celebrarlo con la persona que más quieres y esa persona eres tú –le extiendo el paquete que coge enseguida entre sus manos y lo abre sin piedad.
-Gracias mamá, yo también te quiero mucho –me abraza mientras sujeta fuertemente el osito de peluche.

viernes, 27 de enero de 2012

LA BESTIA DEL CAPITOLIO - Sarah Degel

Hace muchos, muchos años, en el Capitolio se hizo un experimento clandestino del que nunca se ha sabido. Pero hoy, alguien ha logrado desvelarlo. Es realmente impactante, duro y cruel; así que si eres sensible, mejor olvídate de seguir leyendo porque todos los animales conocidos hasta ahora que han sido creados, no tienen absolutamente nada que ver con lo que aquí se va a desvelar.
Thomas Kellerfield era un chico sin escrúpulos, que jamás había conocido los límites.
Fue un joven muy despierto y de buenas calificaciones. En cuanto entró en la Universidad destacó por su astucia e ingenio. Y allí fue donde un profesor le habló de un conocido que tenía a otro conocido que conocía a otro… total, que el fabuloso joven terminó una mañana soleada de sábado con los ojos vendados y las manos atadas en un despacho a gran altura escuchando la voz solemne de alguien bien conocido en el Capitolio, del que no vamos a rebelar el nombre, aunque ya muchos puedan sospechar de quien se trate.
Y allí fue donde ese chico, por primera vez, pudo quitarse la venda y ver al que iba a ser su jefe, pues enseguida cogió una pluma dorada y estampó su firma en un documento por el que pasaba a ser propiedad misma del Capitolio y estaría siempre a su disposición hasta el día de su muerte.
Muchos fueron los éxitos de este joven que enseguida pasó a ocupar un lugar muy importante.
Un buen día, el jefe lo mandó llamar y le hizo una propuesta más que arriesgada que, el chico ya hecho hombre, aceptó al instante, pues no podía evitar sentirse atraído por los retos.
Pasó muchos días y muchas noches sin apenas cerrar los ojos más que unos minutos, devanándose los sesos por conseguir aquello que complaciera a su jefe. Adelgazó considerablemente, sus negras ojeras y su blanca piel le hacían parecer un zombi, pero un zombi que seguía intentando dar con la clave de todo el asunto, un zombi pensante, si eso alguna vez ha sido posible. A veces, dejaba que la locura se hiciera con todo su ser para luego poder volver a la cordura y no caer loco como a muchos de sus compañeros les había pasado en más ocasiones de las que quisiera saber. Hasta que un día, ahí estaba, algo surgió en su cabeza, inmediatamente fue a parar a un papel, después al ordenador, hizo varias investigaciones y pruebas ficticias, hasta que por fin fue a hablar con su jefe para contarle su proyecto y pedirle todo lo necesario para realizar pruebas reales. Al terminar su presentación, estaba exhausto. Miró al jefe directamente a los ojos, y enseguida lo supo, lo había dejado absolutamente impresionado y con ganas de ver si realmente todo aquello iba a funcionar.
Una vez tuvo todos los medios necesarios a su disposición, comenzaron las pruebas que duraron varios años. No le importaba todo el daño que estaba haciendo al realizar sus experimentos, solo necesitaba saber que todo su esfuerzo no había sido en vano y que iba a ser capaz de dejar boquiabierto a su jefe.
Y llegó el día, ese día en que consiguió la perfección más absoluta, ese día en que la mayor perversión jamás imaginada pudo por fin crearse y… se la mostró a su jefe maravillado mientras un discurso salía de su boca como si hubiera pasado horas y horas preparándolo, pero, en realidad, era una mera improvisación fruto de la energía que le invadía.
-Muchas veces se han hablado de las quimeras y sus posibles aspectos.
Según la mitología griega la quimera aparece como un monstruo aterrador que comía animales en grandes cantidades. Considerada madre con Ortro de la Esfinge y el León de Nemea, hija de Tifón y de Edquidna.
El científico hace un breve silencio para mirar a su jefe que ha permanecido en silencio sin cortar su perorata, parece abstraído admirando la bestia enjaulada. A pesar de la situación, el hombre continúa hablando, no le importa no ser escuchado.
-Nadie fue capaz de dar una descripción exacta, pero lo que sí se sabe es que era una mezcla de animales muy poderosos.
También tuve en cuenta, a la quimera representada en aquella fábula donde tenía cabeza de león, vientre de cabra y cola de dragón. Sin olvidar que vomitaba fuego.
Así que, hice una lista de los animales que consideré más poderosos del mundo, seleccioné los mejores y apunté en qué destacaban y uní todas esas cualidades en este ejemplar.
El jefe levanta la mano pidiendo silencio, el científico se calla automáticamente.
-¡Asombroso! Puede marcharse.
El científico abre la boca para decir algo, pero se lo piensa mejor, asiente y deja la estancia donde tan solo se queda el jefe con la aberración creada.

EN LA ACTUALIDAD

El presidente Snow está sentado frente a su escritorio, hay un montón de folios sobre su mesa. En el primero se puede leer el nombre de un proyecto y debajo, una horrenda criatura ocupa el resto de la página.
El hombre roza la hoja con sus dedos, mientras una horrible y desencajada mandíbula intenta conseguir una sonrisa, algo que nunca ha hecho en su vida.
En ese instante, el himno comienza a retumbar por todo el Capitolio. Los Juegos están a punto de empezar y Snow comienza a reír a carcajadas como un loco.

Los Juegos van a comenzar,
Debemos estar listos para poder escapar.
No importa si hace frío o si empezamos a helarnos,
Siempre podemos buscar algo con que taparnos.
Si por el contrario, el calor se hace insoportable
Metámonos en el agua pero no la bebamos que no es potable.
Siempre intentando escuchar todo y ver al contrincante,
Si decidimos pelear, intentemos llevárnoslo por delante.
Así son Los Juegos del Hambre,
Mucha apariencia y jugar como nadie.
Porque si quieres salir vivo tienes que ser inteligente,
O sino ya te estás olvidando de toda tu gente.