Triste, triste y desolado
mi corazón se ha quedado
cuando esas palabras escuché.
Triste, triste y amargado
y sin ganas de vivir.
La oscuridad pesa en mí,
el tiempo eterno se vuelve
y la soledad logra hacerse con mi ser.
Apesadumbrado
y enarcado en la desesperanza,
pero en un halo de ser amado
intenta renacer en vano.
El corazón frío se ha vuelto
y sumido en tal desesperación,
poco a poco va muriendo.
Por qué continuar hablando
de un corazón inexistente,
olvidado,
el que un día fue amado
ohhhh, que romántica estás últimamente, jeje.
ResponderEliminarMe estás recordando mis poesías de juventud!!!
Besotes
Siempre me sorprendes ;o)
ResponderEliminar_alku_
Que bien escribes, me ha encantado :D es una poesia muy bonita, ademas explicas muy bien ese sentimiento :D
ResponderEliminarSaludos!